Antes de seguir leyendo, detente y piensa: ¿qué significado tiene la felicidad para mí?
Hay muchas personas que no encuentran la felicidad, porque no saben cómo es. Por eso, aunque la tengan ante sus ojos, no la ven.
Hay otros que saben lo que están buscando, pero no lo ven porque sus ojos están vendados, es decir, su visión se encuentra bloqueada.
Atendiendo a esto es que hoy te invito a hacer una lista de aquellas cosas, de tu pasado o de tu presente, que sientes que bloquean tu felicidad.
Bloqueos a la Felicidad
¿Qué bloquea tu felicidad? Vamos a conversar sobre algunos de los bloqueos más comunes.
Tener Expectativas Futuristas Sobre la Felicidad: «Cuando termine la universidad seré feliz», «cuando me case seré feliz», «cuando consiga/ cambie de trabajo seré feliz» Casi nunca ese futuro se encuentra a 15 minutos o a 1 día, siempre se encuentra lejos y a veces ni siquiera tiene fecha ese evento que pensamos nos hará feliz.
¿Sabes por qué es importante hacer esta lista? De haberla hecho hace 5 años, hoy te darías cuenta de que tu felicidad era estar donde estás hoy, y no eres feliz porque buscas otra expectativa futurista para tener tu felicidad.
Siempre habrá metas, y lograr esas metas nos hace sentir bien, orgullosos y felices. Pero no deben ser la condicionante de nuestra felicidad.
Pensar que no mereces la felicidad. Cuando creemos que no merecemos la felicidad, en el momento en que somos felices, se dispara una alarma que nos hace sentirnos mal. Esa alarma se llama autosabotaje. Y quiero que sepas que TODOS MERECEMOS SER FELICES. Nacimos para ser felices, porque si no lo somos, estaremos dejando de ejecutar nuestro propósito de vida. Y una vida sin propósito no es vida. Pero ojo: nuestro propósito no es buscar la felicidad eternamente, sino hallarla cada día en los pequeños detalles, en los pequeños y grandes momentos, en los momentos de intimidad con nosotros.
Quedar atrapado en el pasado. Este es el bloqueo más común. Hay cosas en nuestra vida que no podemos elegir, como el día de nuestro nacimiento, a nuestra familia de sangre y nuestro destino durante los primeros años de nuestra niñez. Si no tuviste una buena infancia, o una buena familia, y has crecido con muchas creencias proporcionada por estas situaciones, quiero que sepas que eso es tu pasado, pero no es tu presente, ni es tu futuro. TU PASADO NO DEFINE TU PRESENTE NI TU FUTURO. LO DEFINES TU Y TU DESEO DE UN CAMBIO.
Me quité la venda de los ojos
Cada uno de nosotros es diferente, por esta razón te voy a contar MI EXPERIENCIA. A mí el bloqueo a mi felicidad me la quitó LA ANSIEDAD.
Hace 2 años yo era una persona exitosa. Un trabajo estable, una carrera universitaria y dos maestrías en mi currículum, había logrado todas las metas que me había propuesto para mi edad en ese momento, tenía todo lo que creía necesario para ser feliz. Y llegó la ansiedad.
Y me enseñó que necesitaba otras cosas diferentes a las que yo creía. Necesitaba más horas de sueño (comencé a apreciar más el sueño, cuando quería dormir y no podía), que necesitaba alimentarme mejor (conocí a mi mejor amigo, el chocolate con cacao al 90%), que necesitaba un momento sin hacer nada, solo para conectar conmigo (antes me incomodaba estar sin hacer nada) y luego de hacer todo eso y otras cosas más, hallé mi felicidad.
¿Qué es la felicidad para mí?
Hay 2 conceptos (amor y felicidad) que yo defino relacionándolo con una historia de la biblia. Se encuentra en Primera de Reyes Capítulo 19. Elías, un profeta, le pidió a Dios que quería verlo, y como nadie que viera la cara de Dios quedaba vivo, Dios encontró otra forma de mostrarse. Con este fin, el profeta fue al monte Horeb y esperó en una cueva, ya que se daría cuenta cuando Dios llegara.
Y vino un viento grande y poderoso que rompía peñas y montes, pero Dios no estaba ahí.
Y tras el viento vino un terremoto, pero Dios no estaba ahí.
Y luego del terremoto hubo fuego, y Dios tampoco estaba ahí.
Y tras el fuego, un silbo apacible y delicado. Y cuando Elías escucho esto, cubrió su rostro y salió de la cueva a encontrarse con Dios.
Así mismo la felicidad y el amor, los comparo con ese encuentro entre Elías y Dios.
No está en la euforia, no está en lo estruendoso de la vida, está en ese silbo apacible y delicado. En esa calma que no molesta, en esa tranquilidad y satisfacción que no necesitas mostrar a los demás, ahí está la felicidad.
¿Cuáles son esos bloqueos que vas a trabajar a partir de hoy para encontrarte con tu felicidad y abrazarla?