El Primer Amor… (segundo capítulo de la serie de lecturas Tus Zonas Erróneas).
Ama a tu prójimo como a ti mismo. Eso dice la biblia y nos enseñan desde pequeños. Pero parece que en nuestra mente solo queda la primera parte, y nos olvidamos de la segunda, que es la más importante.
A muchos desde niños les enseñan que amarse a sí mismo es ser egoísta y consentido. Les decían que pensar en los demás antes que en uno mismo era ser una persona buena. Que debías compartir tus cosas con tus hermanos, primos, amigo, etc. incluso cuando no querías, porque eran tus objetos favoritos. Otra de las ideas generadas en la educación temprana es que las opiniones de los niños no importan y que los adultos siempre tienen la razón. Esto crea adolescentes inseguros y adultos autosubvaluados y carentes de amor propio.
Sin embargo, aunque nuestra infancia y adolescencia haya sido formada con estas premisas, la buena noticia es que podemos pasar página, desatarnos de las cadenas del pasado y recomenzar.
¿Qué es el Amor?
Wayne Dyer define el amor como “La capacidad y la buena disposición para permitir que los seres queridos sean lo que ellos elijan para sí mismos, sin insistir en que hagan lo que a ti te satisface o te gusta”
Esto se logra amándose a uno mismo. Cuando reconoces tu valor, que eres único/a y lo bueno que eres, no necesitarás que los demás te validen. No podemos dar lo que no tenemos. Y si no podemos dar, vamos a sentir que no merecemos recibir.
Aún cuando muchas personas con estima deprimida utilizan la manipulación y otras estrategias para obtener amor, en el fondo no son felices porque sienten que no lo merecen.
Amor: Lo que Soy versus lo que Hago
No debemos confundir nuestro valor como persona, con la valoración de nuestro comportamiento hacia nosotros o hacia los demás. Aún cuando nos equivocamos, el hecho en sí no disminuye nuestro valor como persona. Es difícil divorciar estos dos elementos ya que cuando éramos niños y teníamos un mal comportamiento, nos decían “niño malo”, o “mamá no te quiere cuando te portas mal”. En estos ejemplos se ataca al niño, no al comportamiento de éste.
Y así ya de adultos, se manifiestan comportamientos de no aceptación tales como:
Autoaceptación
La autoaceptación es el primer paso para reconectar con el primer amor. Para ello debemos valorarnos desde diferentes puntos de vista y de manera específica.
Un ejemplo es el aspecto físico. Que no me guste mi nariz no significa que no me guste mi yo completo, ya que puedo tener otras áreas que me gusten. Lo mismo aplica para los aspectos intelectuales, sociales, emocionales.
Hagamos un breve ejercicio de valoración del yo. En la planilla de abajo vamos a colocar el aspecto del YO a evaluar. Ej. Mi yo Físico. Luego colocaremos los aspectos que nos gustan y los que no. Luego veamos lo que no te gusta. ¿Por qué no te gusta? ¿Fue porque otra persona te dijo que no era agradable? ¿O porque la sociedad piensa que no es agradable? ¿Qué piensas TÚ al respecto? ¿Es algo que puedes modificar con esfuerzo? ¿Quieres hacerlo?
Aceptarse a uno mismo implica desprenderse de las imposiciones culturales y observar con ojo crítico los mensajes que nos envía la sociedad a través de los medios de comunicación y del entorno social donde nos desenvolvemos.
Amarme y no Quejarme
Cuando tienes autoaceptación, tu vida tiene plenitud y ausencia de quejas y protestas. Cuando nos quejamos ante los demás de lo que no nos gusta, nos generamos una mayor insatisfacción, puesto que lo único que ellos pueden hacer es negar que sea cierto, y tu al final no les crees. Veamos el caso de Ana.
Ana siente que su vestido le queda feo. Le comenta a su amiga “ese vestido no me queda bien, ¿verdad?”. La amiga le responde: – claro que sí. Pero Ana piensa para sus adentros que su amiga le miente para que no se sienta mal, por lo cual Ana se siente aún peor. Una alternativa para Ana, es que si no le gusta ese vestido, se ponga otro con el que se sienta feliz.
La queja (solo por querer quejarse) no es una alternativa en 2 casos; cuando le dices a alguien que estás cansado o cuando le dices que no te sientes bien. Si estás cansado, puedes hacer muchas cosas para remediarlo, pero quejarte con otra persona no es una de ellas, pues no solucionará nada. Te quejarás y seguirás cansado. Lo mismo aplica cuando no te sientes bien.
Las quejas, así como las lamentaciones, nos impiden tomar acción y resolver la causa de la insatisfacción. Provoca que nos tomemos pena. Calcula el tiempo que inviertes en quejarte y cuanto te tomaría buscar una solución y ejecutarla. Te sorprenderías.
¿Por qué no Queremos Amarnos?
Algunas retribuciones que encuentran quienes no han logrado amarse son las siguientes:
- Evitar cualquier riesgo que conlleven las relaciones afectivas.
- Tener una excusa para justificar el hecho de que no te amen en esta vida.
- Conseguir atención, aprobación.
- Ser incapaz de hacerte cargo de tu vida, porque no te sientes digno de la felicidad que anhelas.
Sin embargo, es necesario recordar que el crecimiento es parte de la vida. No arriesgarte, elegir seguir como estas hoy es como elegir la muerte. Algo así como estar muerto en vida.
Ejercicios Para Practicar el Amor Propio
Te invito a practicar estos ejercicios de amor propio.
- Escanea tus pensamientos negativos, del tipo “pasé el examen por suerte”.
- Reestructúralo diciendo “la suerte no tiene nada que ver. Saqué esas notas porque me lo merecía”
- Al recibir un cumplido o gesto afectivo, acéptalo y agradece.
- Ve a un restaurante y pide lo que te guste, sin preocuparte del costo. (como harías si fuera un regalo para un ser querido).
- Al cabo de un día intenso, toma tiempo para ti (una siesta, ir al parque, lo que tú quieras).
- Inicia una actividad que te guste. Empieza eso que has postergado por mucho tiempo.
- Dale amor a tu cuerpo a través de la comida saludable, tomar aire puro, hacer ejercicio, etc. Lo que tú quieras y en la forma que te resulte.
- Expresa tus sentimientos a alguien. Recuerda que debes hacerlo porque quieres, no esperando que el otro te corresponda.
- Mira tu cuerpo frente al espejo. Examina cada parte de él, lo que te gusta y lo que no, y qué puedes hacer tú para sentirte mejor al respecto.
Finalmente, termino con estas preguntas
Sigue esforzándote, que crecer es sinónimo de estar vivo. Reconecta con tu Primer Amor.